La cebolla es un alimento muy versátil, ya que puede consumirse cruda, frita, hervida, asada, encurtida en vinagre, también puedes encontrarla deshidratada, en polvo, caramelizada…
Es compañera y aliada de nuestra cocina ya que la utilizas en innumerables recetas, en ocasiones es como ingrediente o puede ser plena protagonista del plato o guarnición ideal.
Con un origen humilde ya que hay constancia de sus primeros usos desde el 3200 a.C. por los esclavos que construyeron las pirámides de Egipto. De estos primeros usos tenemos inscripciones que nos datan su uso desde la Antigüedad.
Descripción de la cebolla
Hay varias familias de cebolla. Puedes encontrar: Allium Cepa L. y Allium Ascalonicrum L. Aunque puedes encontrarlas en el mercado durante todo el año, el periodo optimo y cuando mejor están es durante la primavera y el verano.
La cebolla es un bulbo que crece en la tierra. Simplemente es un engrosamiento del tallo, teniendo la raíz su forma de filamentos que la puedes encontrar en la parte de debajo del bulbo.
Normalmente el bulbo es la parte que vas a emplear de la cebolla, aunque puede darse el caso de que también emplees la parte verde del tallo. Las partes de emplear dependen de la receta que vas a preparar.
Tipos de Cebolla
- Amarilla
- Blanca
- Roja o Morada
- Dulce o Vidalia
- Calçot
- Chalotta
- Cebolleta
- Cebollita Francesa o Cippolini
- Cebolla Perla
- Ptujski Lük
Curiosidad
En ocasiones, seguro que te habrá ocurrido que al manipular la cebolla, tanto al pelarla como al cocinarla que empieza a picarte los ojos y te pones a llorar.
Esto es debido al que la contiene esencias volátiles sulfurosas, y algunas de estas esencia se disuelven muy rápido en contacto con el agua produciendo ácido sulfúrico.
Esto es lo que ocurre en contacto con las lagrimas que recubren el ojo, y es lo que te hace llorar.