La cerveza ha estado presente en nuestras vidas desde los albores de las primeras civilizaciones y la diversidad en este producto es tan amplia que es díficil establecer una única clasificación. La clasificación de la cerveza puede atender al tipo de fermentación, al color, a los ingredientes, al proceso de fabricación o a su lugar de origen.
Hoy os traemos la clasificación por tipo de fermentación y por color.
Clasificación de la cerveza por tipo de fermentación.
Fermentación alta: son cervezas dulces y con cuerpo. Las levaduras en este tipo de fermentación (de la familia Saccharomyces Cerevisiae) se colocan en la parte superior de los tanques de fermentación. Su temperatura de actuación está entre los 18ºC y los 25ºC. Estas cervezas son las de tipo Ale.
- Fermentación baja: son cervezas pálidas y de marcado sabor a lúpulo. Las levaduras de este tipo de fermentación (cepas de la Saccharomyces Carlsbergensis) se sitúan en la parte inferior de los tanques de fermentación. Su temperatura de actuación está entre los 4ºC y los 9ºC. Estas cervezas son las de tipo Larger, las más habituales.
- Fermentación espontánea: posiblemente las más desconocidas, pero a la vez las más interesantes . Su proceso de fermentación se produce de manera natural sin añadir ninguna levadura, sólo con las nativas del grano presente (de la familia de las Brettanomyces, o Brett). Son cervezas con una marcada acidez y notas agrias. Son las conocidas como cervezas Lambic, ya que proceden del Brabante Flamenco (Bélgica).
- Fermentación mixta : se combinan levaduras de fermentación alta con levaduras de fermentación espontánea, mezclando ambos procesos en la elaboración de estas cervezas. Además se pueden añadir zumos o miel para conseguir diferentes perfiles gustativos y aromáticos.
Clasificación por su color.
La clasificación por color es poco específica ya que el perfil aromático y gustativo de una cerveza no está determinado por su color, si no por su tipo de fermentación y sus ingredientes. Aun así sigue siendo una de las clasificaciones más generales para la cerveza. Asi distinguimos los tres tipos básicos:
- Rubia: la más habitual y la más consumida. Su color es dorado pálido. Sus notas organolépitcas son muy variadas ya que encontramos cervezas rubias de casi todos los tipos de fermentación.
- Tostada: facilmente reconocible por sus tonos ámbar oscuro ligeramente ocre. Son cervezas con más cuerpo y sabor que las rubias clásicas (larger pilsen), aunque también encontramos notas más complejas según sus ingredientes de elaboración.
- Negra: su color se debe al empleo de maltas oscuras y se caracterizan por notas que recuerdan al café y un profundo color oscuro. Las más típicas son las Porter y las Stout.